Tecnología en educación: ¿La asignatura pendiente?

¿Están las instituciones educativas y los profesores preparados para la llegada de la tecnología a las aulas? Todo parece indicar que se están haciendo los esfuerzos, pero la integración plena es aún una asignatura pendiente...

Si de algo estamos seguros hoy día es que el mundo ya no se mueve de la manera que solía hacerlo. Y no estamos diciendo que ahora la tierra gira en el sentido de las agujas del reloj, lo que estamos diciendo es que nuestro mundo gira en torno a cosas distintas, las cuales han cambiado no solo nuestro estilo de vida sino también nuestra forma de ver el mundo.

La percepción que tenemos hoy día de nuestra sociedad no sería la misma sin un elemento tan influyente como la tecnología. Sí, la tecnología podría considerarse como uno de los mayores agentes de cambio en el mundo moderno, una idea que queda claramente demostrada cuando vemos sus huellas en cada uno de los aspectos de nuestra vida. Es por ello que no es de sorprendernos el gran papel que comienza a jugar dentro de uno de los campos vitales para el desarrollo de nuestras sociedades: la educación.

La tecnología ha tocado prácticamente todo lo que nos rodea, y la educación no es la excepción: Los sistemas escolares deben modificar la forma en la que operan para adaptarse a nuestra nueva forma de vida y eso incluye, obligatoriamente la adopción de la tecnología en el proceso de enseñanza – aprendizaje. A continuación resumimos algunas de las iniciativas que actualmente se están desarrollando en España para hacer de la integración educación- tecnología una realidad.

Samsung School

En esta búsqueda de adaptar el aprendizaje a las nuevas generaciones, muchas empresas han comenzado a trabajar arduamente en la integración de la tecnología a la educación, esto con el objetivo de crear un entorno coherente con la realidad. Una de las empresas que ha entendido que nuestro desarrollo depende de la educación ha sido Samsung, la cual le ha apostado no solo a las aplicaciones para el aprendizaje sino también a un programa completo llamado Samsung School.

Se trata de una solución integral de educación que incluye herramientas de enseñanza y aprendizaje innovadoras diseñadas para ayudar a los estudiantes en la adquisición de conocimientos y a los profesores a alcanzar los niveles más exigentes de rendimiento y eficiencia. La idea de la coreana integra tablets con diferentes herramientas interactivas de aprendizaje que ayudan a mejorar tanto la gestión como el intercambio de contenidos educativos.

Según una investigación de Samsung-encargada a la empresa de investigación de mercados Ipsos- el 70% de los padres españoles cree que la tecnología es un pilar para la educación actual. Ellos creen que el uso de herramientas tecnológicas en el aula es beneficiosa ya que ayuda a los alumnos a desenvolverse en el mundo de hoy.

Aunque muchos podrían pensar que la apuesta de integrar la tecnología a la educación podría ser simplemente una estrategia de mercado, la experiencia de padres, alumnos y profesores nos dicen que, más allá de si esta idea es o no una inversión para las empresas, digitalizar el proceso educativo tiene una percepción favorable. Ahora falta que se haga realidad. Y vaya que tiene camino por delante…

Code Madrid: Programación en las aulas

Pero, más allá de las iniciativas de Samsung, otras empresas también intentan apostarle a la transformación del modelo educativo. Tal es el caso de Telefónica que ha creado Code Madrid, una plataforma de cursos sobre programación y robótica. Esta propuesta busca formar a 1500 profesores de área de Tecnología de la Comunidad de Madrid en los contenidos de la nueva asignatura de Programación.

Para ello, la Comunidad de Madrid, en colaboración con Telefónica Learning Services, han desarrollado una plataforma tecnológica donde los profesores podrán realizar a lo largo de este curso tres módulos on line o MOOCs (Massive Online Open Courses), que permitirán que desde el nivel 0, los docentes desarrollen su formación, salten a un nivel intermedio, y terminen el curso habiendo completado el nivel avanzado de conocimientos en programación.

La Comunidad de Madrid pone en marcha este curso de forma pionera la asignatura de Programación, que permitirá que los estudiantes que finalicen esta etapa educativa sepan programar. El objetivo es que cuando concluyan la Educación Secundaria Obligatoria sepan crear una página web y una aplicación para móviles, sepan diseñar un juego de ordenador, manejar la impresión en 3D y tener conocimientos de robótica. Esta medida permitirá a los estudiantes madrileños ser más competitivos en una industria digital.

Así, la asignatura de ‘Programación’ se implantará de manera gradual en los próximos tres cursos. Este curso se imparte en los 15 Institutos de Innovación Tecnológica de la región. El curso 2015/2016 se extenderá a todos los centros públicos, concertados y privados en 1° y 3° de la ESO. En el curso 2016/2017, se implantará en 2° y 4° de la ESO también en todos los centros públicos privados y concertados de la Comunidad de Madrid.

Con este programa, Telefónica busca dotar a los profesionales de la educación con las herramientas necesarias para enseñar a los alumnos a crear páginas web, diseñar aplicaciones móviles o desarrollar proyectos de robótica, esto según explicaron fuentes relacionadas con el programa.

Start Tech

En la Unión Europea se necesitan miles de profesionales de contar con profesionales formados en tecnología, y de la clara necesidad que tienen los niños y jóvenes de contar con este tipo de conocimiento que cada

Y es que si bien cuando pensamos en lugares donde se produce la tecnología, inevitablemente nos viene a la mente Silicon Valley, el lugar donde se ubican las compañías tecnológicas más grandes del mundo, e inclusive pensamos en instituciones como el MIT (Massachusetts Institute of Technology) o la Universidad de Stanford, populares por sus programas de formación en tecnología y software; en Europa, la necesidad de profesionales formados en estas áreas es cada vez mayor, mientras que el interés por los estudios techies parece ir en descenso.

Todos sabemos que nuestro mundo actual se basa en los conocimientos tecnológicos, por lo tanto, es lógico que la demanda de profesionales en el área sea cada vez mayor. La Comisión Europea ha estimado que en 2015 se necesitarán 700.000 expertos en tecnología en toda Europa, lo que supone una evidente oportunidad de empleo.

Según un estudio realizado por CRECIM, el Centro de Investigación para la Educación Científica y Matemática, sobre la situación de la educación científico-técnica española, es necesario promover una sociedad tecnológica y científicamente alfabetizada con el objetivo de mejorar la empleabilidad de los jóvenes españoles.

“Las profesiones STEM (Science, Technology, Engineering & Mathematics –Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas-) son las ocupaciones con mayor previsión de crecimiento, con un incremento estimado de un 14% en los próximos cinco años. Pese a esta previsión, en la última década un 15% menos de estudiantes han optado por carreras científicas y tecnológicas lo que podría hacer que España se encontrase en los próximos años ante un serio problema de falta de profesionales cualificados”, aseguró Digna Couso, Portavoz de CRECIM.

Por esta razón, las empresas Accenture, Altran, HP, Indra, Microsoft y Fundación Telefónica se han unido para crear un proyecto dirigido a fomentar el interés de los niños y jóvenes españoles por los estudios STEM.

El proyecto que han creado se llama Start Tech (www.start-tech.org), una iniciativa pionera que nace gracias al apoyo de estas seis compañías líderes en el sector del conocimiento, de las tecnologías de la información y las comunicaciones. Con el objetivo de fomentar el interés por la formación en esta área, estas empresas han unido recursos y esfuerzos para transmitir a los jóvenes las grandes oportunidades profesionales que ofrece el sector de la tecnología y las comunicaciones.

Para promover el acercamiento de niños y jóvenes hacia los estudios relacionados con el mundo de la ciencia, la tecnología, las matemáticas y las ingenierías, el proyecto incluirá actividades que despierten el interés de los futuros profesionales a través de talleres prácticos, charlas de expertos empresariales en los centros educativos, formación del profesorado, participación de las compañías participantes en campañas institucionales, ferias, campamentos tecnológicos y la creación de un espacio online de intercambio de recursos, información y consejos.

“La apuesta por fomentar las vocaciones tecnológicas y científicas nos permitirá garantizar un empleo de calidad para nuestros jóvenes, a la vez que estaremos contribuyendo a desarrollar un sector vital para el crecimiento del país. La unión de empresas, administración e instituciones académicas es hoy más importante que nunca”, indicó Vicente Moreno, Presidente de Accenture España.

El proyecto Start Tech también cuenta con la colaboración de empresas e instituciones educativas como CRECIM, Con Más Futuro, The App Date, Escuela de Pensamiento Matemático, Invenio y la Universidad Politécnica de Madrid, que han querido formar parte de este proyecto y que también trabajarán de forma activa en el objetivo de aumentar el interés por la ciencia, la tecnología, las matemáticas y la ingeniería.

Ventajas y desventajas

Estamos claros de que el futuro es digital pero la digitalización de la educación, como toda estrategia, debe tener normas y debe ser evaluada desde todos los puntos de vista, teniendo en cuenta ventajas y desventajas.

La llegada de la tecnología a la educación supone muchos aspectos positivos en relación al aprendizaje y a la enseñanza. Las herramientas tecnológicas permiten diseñar materiales didácticos alternativos y novedosos y facilitan la asimilación de contenidos por ser más interactivos. Favorecen también el trabajo colaborativo y promueven el intercambio de ideas, creando un ambiente de cooperación entre alumnos y profesores.

Así, el tiempo es aprovechado de una manera más efectiva porque el estudiante puede acceder a la información de manera casi instantánea y puede enviar sus tareas y asignaciones con solo un “clic”, y los recursos también pueden ser aprovechados al reducir los materiales físicos por formatos digitales. Finalmente uno de los puntos más importantes es que la tecnología puede generar motivación e interés al crear un entorno más dinámico y participativo en el entorno educativo.

Sin embargo, todo cambio también incluye algunos aspectos negativos que podrían ensombrecer la concreción, en este caso, de la digitalización de la educación. Una de estas barreras es sin duda el costo que supone la integración de la tecnología en las aulas, sobre todo porque con su vertiginoso avance estas tienden descontinuarse con rapidez, lo que obliga a actualizar con frecuencia los equipos y a aprender el manejo de nuevos softwares.

Esto también requiere la capacitación continua de los docentes, quienes a su vez tienen que invertir tiempo y dinero en ello. También es importante evitar que, en lugar de sentirse motivados al estudio por las herramientas tecnológicas, los alumnos se distraigan y pierdan tiempo navegando en páginas no académicas que no les aporten beneficios educativos, además de la posibilidad de que los chicos puedan sentirse saturados por la cantidad de información y prefieran en muchos casos el “cortar y pegar” para no saltarse el paso de procesar los contenidos.

Si bien es cierto que la integración de la tecnología en el campo educativo puede no ser tan positivo si consideramos algunos aspectos, debemos entender que los niños y jóvenes de hoy no son iguales a los de otras épocas. Ellos han nacido en una era digital que muestra una forma distinta de abordar el mundo, por lo tanto, no tiene lógica que intentemos educarlos de la misma manera que a las generaciones pasadas.

Si la tecnología ha llegado a cubrir tantos aspectos de nuestra vida, no tiene sentido suponer que en un futuro muy cercano esta no se apodere completamente del sistema de aprendizaje, si es que ya no lo ha hecho. Como en todos los campos en los que está presente, la idea es lograr ver las soluciones tecnológicas como herramientas que podemos controlar sin permitir que ellas nos controlen.

Vivimos en un entorno globalizado y competitivo, por lo que es vital que el sistema educativo pueda desarrollar conocimientos que vayan a la par de las oportunidades que se presentan para las personas en el mundo real y lo que hay fuera del aula es sin duda un mundo que se maneja a través de las tecnologías. Ahora bien, ¿Están las instituciones educativas y los profesores preparados para la llegada de la tecnología a las aulas? Todo parece indicar que se están haciendo los esfuerzos, pero la integración plena es aún una asignatura pendiente…

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