En IFA 2014, Samsung ha presentado varios dispositivos además de sus famosos smartphones como el Note 4 o el Galaxy Note Edge. Uno de los que más han llamado la atención ha sido las Samsung Gear VR, de las que te hemos hablado cuando se presentaron el pasado día 4 de septiembre.
Las Gear VR son unas gafas de realidad aumentada que, por ahora, sólo son compatibles con el Note 4, ya que consisten en un voluminoso dispositivo en el que se introduce el Samsung Galaxy Note 4 (por eso la limitada compatibilidad). Con unas medidas de 90 milímetros de alto por 198 de ancho y 116 de grosor, aprovechan la pantalla de 5,7 pulgadas con resolución QHD del smartphone, consiguiendo un ángulo de visión de 96 grados.
Las posibilidades de las Gear VR se centran por supuesto en los contenidos multimedia: películas, videojuegos o materiales educativos, para que podamos interactuar con ellos con movimientos en 360 grados. Gracias a las lentes duales se conseguirá el deseado efecto tridimensional. Para manejarlas, las Gear VR poseen un trackpad y un botón de retroceso en el lateral derecho, así como una rueda para ajustar el enfoque en la parte superior. Además, podremos controlar lo que veamos mediante movimientos de la cabeza.
Gracias al hecho de introducir el Note 4 en la carcasa, eliminamos todos tipo de cables por lo que la libertad de movimientos es completa: podremos andar con ellas para que la sensación de inmersión sea completa. Samsung ha publicado una infografía con todos los detalles del dispositivo.
Samsung presentó las Gear VR con algunas demos y juegos para que se pudiera comprobar su utilidad, pero por ahora existen pocas aplicaciones. Se espera que en poco tiempo Samsung haga pública una tienda con apps especialmente diseñadas para este dispositivo. Como ocurre siempre en estos casos, todo dependerá de si los desarrolladores crean programas y juegos para que el público se sienta atraído por este gadget.
Y es que el precio es barato, unos 200 dólares, aunque no olvidemos que es imprescindible contar con un Note 4. Si fuera compatible con otros smartphones de tamaño similar, y a ese precio, sin duda sería un éxito porque podríamos disfrutar de juegos de una manera muy directa (paseando por el despacho de Tony Stark, por ejemplo), o disfrutar de nuestro «cine particular», cómodamente sentados en el sofá. Veremos si «liberan» esta compatibilidad y, entonces, seguro que aumentan las aplicaciones con las que se podrá disfrutar de este prometedor dispositivo.