Si quieres saber cómo están tus signos vitales, lo único que necesitarás es estar vestido, claro, con la ropa indicada… Sí, resulta que el floreciente mercado de la ropa tecnológica, esa que puede medir el ritmo cardíaco y respiratorio, se ha venido llenando de una amplia gama de wearables que un día podrían incluso desempeñarse como un médico.
“Las personas pueden ser monitoreadas las 24 horas del día, los siete días de la semana sin tener que ir a un hospital”, dijo dice Bennet Fisher, de CircuiteX, la firma especializada en telas inteligentes de la empresa Noble Biomaterials.
La tecnología se basa en el uso de hilos conductores, generalmente fabricados con plata, que son tejidos en las telas para actuar como sensores que detectan señales eléctricas y como electrocardiogramas y electromiogramas para medir el ritmo cardiaco y la actividad muscular. La plata puede ser tejida a lo largo de la pieza de ropa o bien estar unida por medio de cintas o parches cosidos en áreas específicas.
La información recolectada por la ropa tecnológica puede proveer un perfil general de la salud de una persona: “Lo puedes poner en cualquier prenda que sea ajustada”, dijo Andy Baker, CEO de SmartLife, cuyas camisetas y brasieres deportivos serán lanzados al mercado en septiembre de 2015.
“Nosotros no queremos hacer un diagnóstico, solo queremos recolectar la información y para que el usuario la comparta como desee”, agregó Baker.
Mientras más cerca esté el sensor a la piel, mejor será la señal. Posteriormente estas señales son transmitidas a los detectores en forma de aplicaciones a un smartphone o tablet llevado por el usuario. La información recabada por la ropa tecnológica también puede ser enviada a la nube o a una tercera persona como un doctor.
Baker cree que esta línea de ropa high-tech podría revolucionar la medicina: “Podríamos ponerle una camiseta a 20 personas y un médico vería con un iPad el ritmo cardíaco de todos”. Las reglas de aprobación médica indican que una aplicación como esta está aún a unos años de distancia, pero la empresa SmartLife se enfoca en el uso médico para 2017.