Imagina un tatuaje con el que puedes monitorear la presencia de sustancias químicas en la piel o el ambiente. Una tinta de bacterias para impresoras 3D creada por ingenieros del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) lo logra.
Tras una muestra, el equipo explicó que la tinta está basada en un hidrogel, una mezcla de agua y polímero, nutrientes y la bacteria que soporta tanto ese ambiente como el proceso de impresión en un equipo 3D, por lo que puede plasmarse en estructuras tridimensionales.
Al estar viva la bacteria en la tinta, puede programarse para que reaccione de forma diferente a sustancias químicas, pues se logra iluminar.
La demostración de los ingenieros del MIT que crearon la tinta de bacterias para impresoras 3D, demostraron que en un parche de hidrogel colocado en la mano de una persona, previamente untada con varias sustancias químicas, el diseño se iluminaba de diferentes colores, dependiendo de la zona. Es lo que explican como una aplicación inmediata en tatuajes vivientes que puedan monitorizar agentes químicos.
Equipo de redacción de GizTab