5 razones por las que deberíamos poder cambiar hoy mismo el router que nos da el operador

Al cambiar el router, podremos obtener mejoras en la velocidad y el alcance de la señal, así como una mayor seguridad y control sobre tu red doméstica

El router es un equipo fundamental en cualquier arquitectura de red, ya que sirve para conectar Internet con una red local y sus dispositivos. Normalmente, cuando contratas los servicios de una empresa te provee de todo lo necesario, pero existen razones para querer cambiar el router que te da tu operador.

A diferencia de los router que te dan al contratar servicios de Internet, un router más potente cuenta con más capacidades a nivel de software y hardware. En general, es una buena idea cambiar el router que proporciona la operadora, ya que estos routers a menudo tienen limitaciones y no ofrecen tantas opciones de configuración como los routers de terceros.

El problema está en que actualmente en España los operadores no nos facilitan el cambio de router: hay unos puertos de configuración con los códigos de acceso a la fibra que deben facilitarnos para hacer el cambio… y muchas operadoras los dan, pero otros no.

Cosa que debería cambiar en breve ya que desde la Unión Europea se ha indicado que como usuarios deberíamos tener libertad para poder elegir el router que queramos, tal como hacemos como los móviles.

La clave de momento sería comentarlo con tu operador, y expresarle que quieres cambiar de router por uno que te permita exprimir al máximo tu experiencia en Internet. Aquí algunas de las razones.

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Los router del operador tienen menos velocidad

La primera razón por la que deberías cambiar hoy mismo el router que te da tu operador es que tienen menor velocidad de trabajo o conexión.

La mayoría de los routers básicos modernos que proveen las empresas de servicios de Internet tienen conexión WiFi y puertos de Ethernet con bajas capacidades.

Por ejemplo, a la hora de jugar por Internet es necesario que la latencia sea la menor posible, una buena velocidad de conexión y señal estable.

De igual forma, para ver contenidos multimedia online en alta definición, se necesita de una buena velocidad de conexión a la red, pero también del router.

Los router de operador tienen menor cobertura o señal inalámbrica

Otra de las razones por las que deberíamos cambiar el router que te da tu operador es para tener mejor señal. Prácticamente todos los routers actuales cuentan con conexión WiFi, que es la principal característica que quieren los usuarios, ya que así pueden conectar sus dispositivos móviles.

Ahora bien, con la enorme cantidad de dispositivos que funcionan con IOT o el Internet de las Cosas, se necesita una mejor calidad de la señal. Si quieres conectar más equipos a la red WiFi de tu casa y a mayor distancia, no te quedará otra que cambiar a un router con más antenas.

Además los routers actuales cuentan con WiFi 6, que permite tener múltiples dispositivos conectados al mismo tiempo, priorizando cuál necesita más señal.

Y es que en casa cada vez tenemos más dispositivos que necesitan conexión a la Wifi: la tele, enchufes inteligentes, altavoces, terminales móviles, termostatos, electrodomésticos y hasta robots aspiradores.

Menos controles de seguridad o parental

El router que te da tu operador por lo general no dispone de funcionalidades muy avanzadas en cuanto a control parental, domótica, control horario de conexión por dispositivo, Wi-Fi Hotspot para invitados… En realidad la mayoría de usuarios tenemos el concepto del router como un dispositivo únicamente para captar la señal de fibra pero en realidad los routers pueden tener toda una serie de opciones como esta. 

Por esto los routers de las operadoras en general tienen menores controles de seguridad que otros comerciales a nivel de conexión inalámbrica y cifrado de las comunicaciones.

Por otro lado, hay routers comerciales que cuentan con más funciones extras para proteger la red, como por ejemplo un firewall o un VPN.

También hay que mencionar la capacidad de los routers comerciales para crear una red de invitados o dar control parental. Este último aspecto, permite a los padres limitar el tiempo que sus hijos usan Internet, ver qué páginas visitan o impedir el acceso a cierto contenido.

Carecen de control remoto o de configuración mediante apps móviles

Los routers comerciales modernos tienen sistemas de configuración y supervisión mediante aplicaciones móviles, una función muy útil para controlarlo desde la palma de tu mano.

Es otra de las razones por las que deberías cambiar hoy mismo el router que te da tu operador, más aún para usar el control parental.

Con las aplicaciones móviles que controlan el router WiFi puedes ver por ejemplo cuántos equipos móviles están conectados o cuántos megas se han consumido.

Puedes desconectar la red, o impedir que un equipo se conecte a ella. También aplicar otras valiosas características de control parental.

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Un router comercial tiene más cantidad de puertos Ethernet y permite actualizar el firmware

La última de las razones por las que deberías cambiar hoy mismo el router que te da tu operador es que no tiene suficientes puertos Ethernet. Esta característica de los routers comerciales es fundamental si necesitas conectar varios equipos mediante cables, o que todos los puertos tengan la misma velocidad.

Por otra parte, los routers de la compañía de Internet no suelen darle al usuario la libertad para modificar o actualizar el firmware del equipo. En cambio, si en el futuro tienes que hacer ciertos ajustes del router para mejorar su funcionalidad, podrás actualizar su software sin problema.

Además, los routers de la operadora pueden sufrir problemas de estabilidad, lo que puede afectar a la conexión a internet. Un router de terceros puede ofrecer una conexión más estable y fiable.

En resumen, cambiar el router que le proporciona la operadora puede mejorar la velocidad, alcance, seguridad, funcionalidades y control de tu red doméstica.

Sin embargo, antes de cambiar el router de la operadora, es importante verificar si la operadora permite el uso de un router de terceros y si hay alguna configuración especial que deba tener en cuenta para asegurarse de que su conexión a internet siga funcionando correctamente.

Periodista de tecnología.

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