Los usuarios de Twitter han entrado en pánico al ver los cambios reprochables que ha estado haciendo Elon Musk al llegar al poder de esta red social. ¿Es abrir una cuenta en Mastodon la real alternativa a la red social del pajarito azul?
Es que a ver: Entre los precios, cambios de condiciones, publicidad, el verificado bajo previo pago, los despidos masivos por correo electrónico, etc. La gente de Twitter está muy descontenta y ahora están huyendo a otras redes sociales que siguen la misma filosofía de lo que Twitter fue hace unos pocos meses antes de la compra por parte del propietario de Tesla.
Cabe decir que Mastodon no es nueva, ni mucho menos, lleva ya unos cuantos años entre nosotros. Vamos a contarte todo sobre Mastodon y al terminar sabrás qué le hace estar hoy en boca de todos.
¿Qué hay detrás de Mastodon?
Normalmente las redes sociales tienen servidores propios, como pasa con Facebook. Sin embargo, Mastodon está alojada en servidores administrados por voluntarios, así que hay cientos de servidores alrededor de todo el globo terrestre.
La idea de Mastodon era, y es, crear una especie de esfera pública que fuera controlada por diversas personas y no perteneciera solo a una empresa.
La alternativa a Twitter tiene un enfoque único, y es que, en un principio, eso era lo que le dio la fama a la red social del pajarito azul. Ahora Mastodon se posiciona como un competidor de grandes plataformas de redes sociales.
Cada día miles de usuarios en todo el mundo se unen a Mastodon, sobre todo, desde que Elon Musk, un empresario multimillonario y con mucho poder ha decidido comprar Twitter. Esta red social era, y sigue siendo, la principal vía de información de millones de usuarios en Internet, y eso ahora peligra al estar en manos de una entidad privada y con valores de derechas.
Lo bueno de Mastodon es que cada usuario puede elegir su propio proveedor, e incluso, si tienes los materiales y los conocimientos, puedes crear tu propia estancia o servidor de Mastodon. Lo que complica la expansión de Mastodon es que al no ser centralizado cuesta un poco encontrar a otros usuarios.
¿Cómo funciona?
Esta red social surgió en el año 2016 y a día de hoy es una red social que planta cara, principalmente a Twitter, donde hay más libertad y escasa censura, salvo que incumplas las normas de tu servidor o de otros donde participes.
Es una red social de código abierto y está disponible en su perfil de Github, es ahí donde puedes entrar para crear tu propio servidor, tal y como te dijimos que podías hacer en el apartado anterior.
Es una plataforma gratuita, pero puedes donar a través de Patreon. Es prima hermana de Twitter, pero tiene sutiles diferencias. Por ejemplo, los datos de los usuarios no se usan con fines lucrativos ni de publicidad personalizada, por ahora claro.
Puedes escribir Toots (tweets) de hasta 500 caracteres, así que puedes explayarte más libremente llegando a incluir GIFs, vídeos, emojis, etiquetas (hashtags), imágenes, etc. También puedes hacer RT a todo lo que te guste y dar favorito.
Al crear tu cuenta en esta red social debes unirte a un servidor y, en base a eso, se crea tu perfil. Cada servidor tiene una comunidad, por lo que esta red social es muy limitada. De momento, solo puedes relacionarte con gente de ese servidor, salvo que tengas el nombre completo y así puedes ampliar la búsqueda a otros servidores.
Un ejemplo, si tu nombre es @Sofia_ en Mostodon sería @Sofia_@mastodon.(servidor). Para buscar dentro de tu servidor, si tú y yo compartimos el mismo, con que busques mi nombre es suficiente, pero si quieres buscar fuera del servidor, ahí debes poner todo el nombre de usuario, incluyendo el host donde está alojado.
Mastodon en Android y en iOS
Puedes descargar la app gratuita para Android y para iPhone. Rellena los campos que te solicitan, crea tu perfil y luego completa la biografía. Es muy sencillo, solo tienes que elegir un nombre original que NO este usado y unirte a algún servidor.
De momento la app está haciéndose famosa, pero no quiere decir que vaya a desbancar a Twitter, no tampoco quiere decir que vaya a seguir siendo tan independiente y tan descentralizada siempre. Cuando hay dinero de por medio, las grandes empresas suelen cambiar ligeramente el rumbo.
