En entregas anteriores, además de alertaros acerca de los riesgos que acarrea el conectarse a redes públicas –protegidas o no- también os hemos compartido recomendaciones para evitar que resultéis liados con alguna movida en ellas.
Esta vez, ha sido la gente de Kaspersky Lab que ha tomado la batuta en el asunto para fortalecer el llamado de prevención durante esta temporada, en la que con mayor frecuencia los usuarios optan por redes WiFi en hoteles, cafeterías y aeropuertos, entre otros.
“Algunos proveedores de servicios móviles ponen a disposición de sus clientes de iOS y Android listas de redes inalámbricas de confianza. De esta manera, los usuarios se conectan automáticamente a una variedad de puntos de acceso WiFi. El problema está en que, una vez conectado a uno de estos puntos de acceso, parece que el dispositivo puede conectarse automáticamente a cualquier red inalámbrica que tenga el mismo nombre y SSID”, reseñaron informantes de la líder en seguridad informática.
En ese sentido, los sabios de la compañía explicaron que para acceder a una red WiFi pública, normalmente se solicita al usuario un registro con nombre y contraseña. Aquí, entran en escena los hackers, quienes crean hotspots fraudulentos con los mismos nombres de otras redes inalámbricas reales; y si el usuario se ha conectado ese mismo día a la real, su dispositivo se conectará automáticamente también a la falsa facilitando a los ciberdelincuentes el acceso a toda su información, infectándolos con malwares y realizando otras acciones maliciosas.
Configurar nuestro dispositivo para que se conecte a estas redes abiertas tiene sus ventajas, si asumimos que son seguras. Pero, en realidad no se sabe hasta qué punto son seguras, ya que podrían tener fugas.
Mejor prevenir…
Además de la valiosa información, la gente de Kaspersky compartió un cuarteto de recomendaciones para evitar que las conexiones automáticas se conviertan en apocalípticas causas.
1. Configurar los dispositivos a fin de que se pida permiso antes de conectarse a una red inalámbrica.
2. Tener al día todas las actualizaciones disponibles.
3. Evitar las redes WiFi públicas en general.
4. Instalar un antivirus fuerte para protegerse en caso de que algo vaya mal.
¡Estáis avisados! No hay excusas para caer en las garras del cibercrimen “por culpa” de alguna red WiFi.
Equipo de redacción de GizTab
