El triunfo de Trump podría acabar con Apple, esa es una premisa que recorre la red luego que durante su campaña, el recién electo presidente dejó claro que desea que esta compañía regrese con sus fábricas a Estados Unidos o de contrario, todo aquello que venga importado de China o de los lugares que estén establecidas las marcas, tendrán impuestos que podría alcanzar el 50 por ciento del precio del producto, lo que haría inviable la operación.
Otra de las razones de porque Trump podría acabar con Apple, esta relacionada con la posibilidad de mudar las líneas de montaje a territorio norteamericano, ya que un empleado fuera de las fronteras estadounidenses puede ganar un sueldo cuatro veces menor al pago mínimo que le deben hacer a un trabajador nacional, esto quiere decir que el precio final de un iPhone hecho en Estados Unidos aumentaría dramáticamente su precio y por supuesto sus ventas se desplomarían.
Las proyecciones hechas por el sitio Motherboard señalan que solamente el iPhone 6s Plus pasaría a costar al menos 50 dólares más por unidad, un cálculo que si lo llevamos al iPhone 7, podría rozar el precio mínimo de los 1.000 dólares, es decir, un móvil prácticamente inaccesible.
Pero este cálculo sobre el capricho con el Trump podría acabar con Apple no es simplemente un ejercicio de imaginación. El sitio Technology Review presenta un análisis de la firma IHS, sobre los componentes del iPhone 6s Plus, su precio actual está alrededor de los 660 euros, y cuesta fabricarlo poco más de 200 euros. En este momento son unas siete fábricas en China y una en Brasil que se encargan de producir los móviles Apple, hacer el montaje de los componentes para formar un iPhone cuesta unos 3,5 euros, pero de montarse en Estados Unidos este costo se multiplicaría por diez.
El desaparecido Steve Jobs en una conversación con el presidente Barack Obama también le explicó que su decisión de no ensamblar el iPhone en EEUU no era impulsado únicamente por la mano de obra barata, el creador comentaba que en China se encuentra un personal calificado con fábricas flexibles que pueden adaptar una gran cantidad de componentes a las necesidades de sus móviles, algo que le cuesta mucho conseguir en Norte América.
Los productos Apple poseen alrededor de 766 piezas y 346 de ellas son producidas por proveedores chinos, le sigue Japón con 126 y luego Taiwán con 41, en Estados Unidos solo se realizan 69 piezas requeridas para los productos Apple por lo que sin duda la decisión de Trump podría acabar con Apple.
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La otra cara de la moneda
En un escenario en el que Trump decida no forzar a Apple a producir sus móviles en Estados Unidos, pero si mantener las medidas contra China, su arma secreta para la respuesta sería No Más iPhone, debido a que el país asiático realmente no tiene beneficios cuantiosos por la producción de este dispositivo y su respuesta sería un corte de suministro.
De acuerdo con el sitio Actualidad RT, incluso podría ser imposible mudar la línea de montaje desde China a México, su más próximo vecino, con el objetivo de evadir la medida asfixiante, pero Trump también impulsaría impuestos por encima del 35 por ciento en los productos provenientes de ese país. En definitiva parece que Trump podría acabar con Apple si avanza con este proyecto.
Tim Cook llama a la calma
Luego de conocer los resultados de las elecciones en Estados Unidos con los que Trump podría acabar con Apple, Tim Cook hizo circular una carta a sus empleados por correo electrónico en la que les señalaba que estaba escuchando a muchos de ellos comentando sobre los resultados electorales y que comprendía que dentro de Apple había mucha diversidad, incluso política, además de que en unos resultados tan cerrados en voto popular era comprensible que hubiese sentimientos tan fuertes.
Sus palabras hablaban de avanzar y de hacerlos juntos a pesar de la llegada de Trump a la Casa Blanca “Recuerdo algo que el Dr. Martin Luther King, Jr. dijo hace 50 años: Si no puedes volar, corre. Si no puedes correr, entonces camina. Si no puedes caminar, entonces gatea, pero hagas lo que hagas, tienes que seguir avanzando. Este consejo es atemporal, y un recordatorio de que solo hacemos un gran trabajo y mejoramos el mundo avanzando”.
Tim Cook señalaba que sin importar quien fuese el presidente de los Estados Unidos, Apple continuaría trabajando y mantendrían el norte de su misión “nuestros productos conectan a personas en todas partes, y proporcionan las herramientas para que nuestros clientes hagan grandes cosas para mejorar sus vidas y el mundo en general”.
¿Y si Apple se muda de EEUU?
No hay posiciones oficiales ni extraoficiales, pero anta la posibilidad de que Trump podría acabar con Apple con sus medidas agobiantes la empresa de la manzana mordida podría tomar medidas extraordinarias y radicales como la posibilidad de mudarse fuera de Estados Unidos, así pues es una posibilidad que se instalen en tierras vecinas o hasta que dieran el salto a Europa, un continente en el que tienen gran éxito y que al fin de cuentas estarían mucho más cerca de sus socios fabricantes asiáticos.
Periodista, amante de las redes sociales y de la tecnología, dad´s since 2015.