Con la visión de conseguir una conducción automatizada, las compañías TomTom y Bosch han llegado a un acuerdo para colaborar en el área de los mapas; la primera, los diseñará; mientras que la segunda definirá las especificaciones que esos mapas deben cumplir.
En la conducción automatizada, la seguridad y el confort dependen de que el material cartográfico esté actualizado.
Los datos han sido aportados por fuentes de TomTom, revelando además que hoy día los mapas ya están siendo utilizados en los coches automatizados que Bosch está probando en algunas carreteras públicas de Alemania (A81) y en Estados Unidos (I280).
“Para Bosch y TomTom, esta colaboración en el área de mapas para la conducción automatizada es una extensión de un exitoso acuerdo ya existente. Para el horizonte conectado de Bosch, TomTom también proporciona información dinámica de mapas a través de su servicio en tiempo real, aunque sin ninguna capa de localización”, han destacado los informantes.
De este modo, el horizonte conectado hace posible al usuario predecir la ruta que tiene por delante y adaptar a ella la estrategia de conducción.
En este sentido, los de la líder con sede central en Ámsterdam han expuesto que el sistema reconoce los posibles puntos negros tras las cuestas o el comienzo de un atasco, en su etapa inicial, y así poder automáticamente aminorar la velocidad del coche a tiempo.
“Esto reduce considerablemente el riesgo de colisión. Además, un comportamiento de conducción más suave se traduce en un mayor confort para el conductor y en una mayor eficiencia de combustible para el coche”, han apuntado.
Esta solución fue mostrada por primera vez en 2014, en la feria de vehículos comerciales IAA de Hanover.
Equipo de redacción de GizTab